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Otitis en perros y gatos

Escrito por Sjoerd |

Muchos perros y gatos se enfrentan a una otitis en algún momento de su vida. Cuando esta afección no se detecta a tiempo y se trata correctamente, puede provocar daños en la audición. En este artículo leerás cómo reconocer una posible otitis y qué debes hacer (o hacer que hagan).

Las otitis son un problema muy frecuente en perros y gatos. Los animales sacuden la cabeza, se rascan la oreja y a veces chillan de dolor. El conducto auditivo externo puede estar sucio y rojo pero también el propio oído (el conducto auditivo interno) suele estar sucio, rojo, caliente y a menudo huele mal. En la mayoría de los casos se trata, por tanto, de una inflamación del conducto auditivo. A veces se trata de una otitis media.

Bolsas de sangre en la oreja y oreja encogida

El riesgo de sacudir y rascarse mucho es la aparición de una bolsa de sangre en la oreja. Se observa una enorme hinchazón del pabellón auricular, que debe ser tratada o intervenida por el veterinario 10 días después de su aparición; esto en relación con el periodo de cicatrización del vaso sanguíneo en el pabellón auricular. Si esta oreja no se trata de la manera adecuada, se produce una oreja encogida muy dolorosa.

Mayor sensibilidad

Todas las razas de perros y gatos pueden tener una otitis. En los perros, sí ocurre que algunas razas la padecen más que otras. Algunos ejemplos son los Cocker Spaniel, los Pastores Alemanes y los Golden Retriever.

Causas de la otitis

En perros y gatos, que pasan mucho tiempo al aire libre, el ácaro del oído es una causa importante de otitis. Son pequeños insectos blancos parecidos a arañas que se alimentan de cerumen. Provocan picor y son tan pequeños que a simple vista es difícil verlos. También pueden causar picor intenso en la cabeza y el cuello, que a veces incluso después de combatir los ácaros dura todavía algunas semanas. Además, hay distintos tipos de bacterias y levaduras a las que también les gusta vivir en el conducto auditivo y que allí provocan problemas.

Síntomas de otitis

Los síntomas de una otitis son bastante claros. El animal aletea con las orejas o se las rasca y a veces chilla de dolor y a menudo también lleva la cabeza ladeada. El interior del pabellón auricular está rojo y sucio. Además, puede oler muy desagradable y el oído puede ‘supurar’. En una otitis media, el órgano del equilibrio puede verse afectado; entonces las molestias son más graves. El animal camina más a menudo con la cabeza ladeada y puede tener trastornos del equilibrio y camina entonces a menudo en círculos o incluso se cae. En cualquier animal con una otitis es importante una buena exploración. El veterinario tendrá que comprobar si hay una infestación por ácaro del oído y/o una infección por bacterias y/o hongos del conducto auditivo o si ocurre otra cosa. A veces es necesaria una investigación adicional. En ese caso podemos pensar en un frotis o un cultivo del cerumen, pero también en radiografías del cráneo.

¿Qué hacer ante una otitis?

En caso de infección por ácaros del oído, puedes obtener buenos resultados con una pomada ótica con un insecticida. En infecciones por bacterias o levaduras se necesitan antibióticos o pomadas antifúngicas. Cuando el conducto auditivo está muy sucio, primero se lavan las orejas con una sedación ligera. En caso necesario, a animales que lo pasan muy mal se les pueden dar analgésicos o comprimidos para reducir el picor, para aliviar el dolor y el picor. En una otitis media es necesario un tratamiento (prolongado) con antibióticos. Los animales con inflamaciones recurrentes o crónicas pueden desarrollar un conducto auditivo que se cierra por exceso de tejido. Debe comprobarse si hay tumores y cuerpos extraños, porque por un cierre así o por una lesión del tímpano pueden quedar más o menos sordos.

Si tu perro sufre rápidamente de mucho cerumen, Otoact Oorreiniger es un buen limpiador ótico. ¡Úsalo en el exterior! Tu perro va a sacudir la cabeza y pueden salir auténticos pegotes de cerumen de las orejas. Si además las orejas están irritadas, entonces una combinación con ICF Otodine es muy buena. Este limpiador ótico frena el crecimiento de microorganismos, como bacterias y levaduras, en los oídos. ¿Las molestias no disminuyen? Entonces acude siempre a tu veterinario para una revisión.

Medidas preventivas

En perros o gatos sensibles a problemas de oído es importante intentar prevenir las molestias tanto como sea posible. Lo mejor es hacerlo limpiando las orejas (y los conductos auditivos) con regularidad con un limpiador ótico. Por ejemplo, podrías optar por hacerlo cada dos semanas o justo después de que el perro haya nadado. Algunos ejemplos de productos que puedes utilizar para ello son Monoclean Oorreiniger, Epi-Otic SIS Oorreiniger o HexoClean. Si tu perro no tiene molestias, NO es necesario utilizar estos productos.

Atención: ¡no debes intentar limpiar el conducto auditivo con bastoncillos de algodón!

Tratamiento de molestias leves del oído externo

En caso de irritación leve o enrojecimiento del conducto auditivo externo, Dermiel Oordruppels puede suavizar y favorecer la recuperación. Además, estas molestias también pueden tratarse de forma natural con Puur Auris. Si las molestias no desaparecen o si tu animal tiene problemas de oído más graves, te recomendamos consultar a tu veterinario.

¿Tienes más preguntas sobre la otitis en perros o gatos o sobre problemas de oído en general? Entonces ponte en contacto con nuestro veterinario a través de veterinario@medpets.es.