Servicio
Carrito
Menú
Hasta un 10% de descuento en tus productos favoritos! Leer más

Snacks para perros

En la educación o el adiestramiento de tu perro hay varias cosas importantes. Debes ser constante, tener paciencia, entrenar de forma positiva y llevar siempre contigo snacks de entrenamiento.

Más información

1 - 14 de 14 Productos

La recompensa como estímulo extra

No a todos los cuidadores les convence recompensar con comida, pero en muchos perros puede ser un estímulo adicional. Como alternativa, también se puede recompensar con la voz o mediante el juego. En el entrenamiento se trata de aprender y no de picar sin más, así que opta por bocados pequeños y responsables como recompensa, por ejemplo Hill’s Hypoallergenic Treats o Antelope Dog Biscuits. Además, es importante que las galletas para perros o croquetas no sean difíciles de masticar, porque si no, habrá que esperar demasiado cada vez. No todas las galletas sirven para entrenar. Elige snacks blandos en lugar de secos; a la mayoría de los perros les gustan más las galletas suaves y así se esfuerzan más durante el entrenamiento. Reserva esos snacks exclusivamente para las sesiones de adiestramiento.

Recompensa con atención

Es mejor que el perro reciba algo que normalmente no obtiene, para que realmente esté dispuesto a trabajar por esa galleta y se esfuerce de verdad. Una recompensa no es solo un snack, también es interacción entre humano y perro. Así que, además del premio, dale a tu perro una caricia o un buen abrazo cuando se haya portado bien. A los perros les gusta esforzarse por algo que consideran muy sabroso o agradable. Ten en cuenta que no todos los perros viven nuestras “recompensas” como tal. Algunos no disfrutan que los acaricien o abracen. Encuentra aquello que tu perro percibe como verdaderamente gratificante.

Condicionamiento

Este método de entrenamiento fue demostrado por el investigador ruso Iván Pávlov, que hacía sonar primero una campanilla y luego mostraba, dejaba oler y comer algo sabroso al perro, lo que provocaba salivación. Tras repetirlo durante varios días, bastaba con oír la campanilla para que el perro empezara a salivar. Así funciona la educación de un perro, solo que sustituimos la campanilla por una orden como “sit”, “tumba” o “quieto”. El perro asocia la orden con recibir una recompensa y por eso muestra la conducta deseada.

Recompensa responsable

Las galletas son fáciles de llevar y gustan a cualquier perro. Al comprar galletas para perros, elige un tipo que sea adecuado para tu compañero y con ingredientes saludables. Lleva siempre unas cuantas galletas en el bolsillo cuando salgáis a pasear; así podrás recompensar el buen comportamiento y confirmarle que merece la pena portarse bien. Mímalo o utiliza las galletas para entrenar y jugar. Te sorprenderá lo que puede aprender y lo que hace por una buena galleta. Los perros esperarán con ilusión su galleta diaria y, por eso, se esforzarán cada día. Cuando un ejercicio ya está aprendido, no es necesario recompensar con un snack cada vez. Para mantener la motivación y que siga mostrando la conducta, conviene recompensar con un snack en aproximadamente el 25% de las ocasiones.