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¿Necesitas un bozal para tu perro?

Escrito por Milou |

A veces un bozal es necesario como ayuda o para prevenir conductas no deseadas en tu perro. Por ejemplo, puede ser útil para perros que deben visitar al veterinario, con el objetivo de evitar que muerdan debido al dolor o al miedo, o para perros que no se llevan bien con otros perros en la calle. Además, en algunos países la normativa exige que los perros lleven bozal o que al menos lo lleves contigo.

Perro con bozal

Tipos de bozales

Existen diferentes tipos de bozales, como un bozal de nailon (correa de hocico) o un bozal de plástico, cuero o metal.

Un bozal de nailon (Pawise nylon muilkorf o Mikki Muilkorf) es una correa resistente que rodea el hocico y se fija con una cinta detrás de las orejas. Con este sistema se puede evitar que el perro muerda. Asegúrate de elegir la medida correcta, porque si la correa queda demasiado suelta el perro podría morder igualmente. Esta correa es adecuada, por ejemplo, como ayuda durante una visita al veterinario. Atención: Como este tipo de bozal mantiene el hocico totalmente cerrado, el perro no puede jadear con esta correa de hocico. Por este motivo, el producto NO es adecuado para un uso prolongado, para días calurosos o durante un paseo.

Además existe un bozal con forma de cesta (Baskerville ultra muzzle o Buster Kunststof Muilkorf). Este bozal cubre todo el hocico y también se fija con una correa detrás de las orejas. Aunque visualmente pueda parecer más “intenso” que una correa de hocico, resulta más cómodo para el perro. El perro puede mover el hocico y también puede jadear y beber con este tipo de bozal. Con la sujeción adecuada no existe ningún riesgo de que el perro pueda morder. Hay varios modelos disponibles, como un bozal de plástico o de cuero. El bozal de plástico es fácil de limpiar. Es importante que el bozal quede bien ajustado, ni demasiado apretado ni demasiado suelto, para evitar que se desplace.

Para perros braquicéfalos (entre otros, Pug, Bulldog Inglés y Bulldog Francés) es muy difícil encontrar un bozal que se ajuste correctamente. Debido a la anatomía del perro, las cestas no se mantienen bien en su sitio y, como el puente nasal es muy corto, los bozales pueden interferir con los ojos. El Baskerville Classic Muzzle Muilkorf sí dispone de varias tallas especialmente diseñadas para razas braquicéfalas (tallas 12 a 16).

En la clínica veterinaria a veces se utiliza una cinta de lino. Esta cinta se coloca alrededor del hocico con un nudo sobre el puente nasal y se cruza por debajo de la mandíbula, para luego atarse detrás de las orejas. Solo es adecuada para un uso de corta duración.

 

Bozales

¿Cómo puedes enseñar a tu perro a llevar un bozal?

Un bozal puede resultar incómodo y causar estrés o miedo si se coloca de manera repentina. Por eso es importante introducirlo poco a poco y enseñarlo mediante asociaciones positivas.

Primero deja que el perro conozca el bozal mostrándoselo. Asegúrate de tener a mano suficientes golosinas o croquetas. Cuando el perro se acerque a olerlo, prémialo con tu voz o con una golosina. Después espera hasta que introduzca una pequeña parte de su hocico en el bozal y dale la recompensa solo entonces. El siguiente paso es lograr que introduzca todo el hocico antes de recibir la recompensa. Puedes conseguirlo colocando la golosina dentro del bozal o ofreciéndola a través de uno de los agujeros de la parte delantera.

Cuando el perro meta el hocico sin dudar, puedes intentar mantener el bozal unos segundos sobre el hocico antes de darle la recompensa. Ese tiempo puede ampliarse poco a poco. Si lo tolera bien, puedes colocar las correas detrás de las orejas y sujetarlas unos segundos. Así el perro se acostumbra a la sensación de fijación del bozal. Si se comporta bien, prémialo también en ese momento con tu voz y algo rico. El siguiente paso consiste en cerrar la correa durante un instante, premiarlo si permanece tranquilo y quitarla de inmediato. Practica este paso dejando la correa cerrada un poco más cada vez y ofrece varias golosinas seguidas. Es importante retirar el bozal antes de que el perro empiece a sentirlo como algo molesto. Intenta también evitar que intente quitárselo con las patas.

Cuando el perro haya superado bien estos ejercicios, puedes intentar pasear un momento con él llevando el bozal. Realiza primero este ejercicio dentro de casa. Si esto va bien, puedes hacer un pequeño paseo fuera. Si el perro se comporta bien, prémialo con tu voz o dale algo rico a través del bozal.

Dale atención principalmente cuando lleve el bozal puesto, porque debe aprender que no es algo negativo y que incluso puede ser algo agradable. Cuando se lo quites, ya no es necesario dar recompensas. De lo contrario, el perro podría pensar que es motivo de celebración que el bozal se retire.

Reglas en los Países Bajos

En los Países Bajos actualmente no existe una obligación general de usar bozal, pero puede imponerse como medida tras un incidente de mordedura. Se intenta reducir el número de incidentes elaborando una lista de perros de alto riesgo. Los propietarios de estas razas deberán seguir obligatoriamente un curso de educación con su perro en el futuro. Para quienes deseen consultar esta lista: Hoog riesgo honden. Sin embargo, no son solo estas razas las que provocan incidentes. Muchos incidentes ocurren con otras razas y a menudo en el entorno doméstico. Por ello, el LICG ha creado una página donde se ofrece más información sobre la comprensión del comportamiento canino, la educación del perro y qué hacer en caso de un incidente de mordedura.

Reglas en el extranjero

En algunos países existen normas sobre llevar o transportar un bozal. A continuación un resumen:

Alemania: En algunos estados federales existe obligación de bozal para determinadas razas.
España: Los “perros potencialmente peligrosos” deben ir siempre atados y además existe obligación de bozal.
Italia: En lugares públicos es obligatorio llevar al perro atado y con bozal.
Austria: Los perros deben ir atados y en el transporte público el bozal es obligatorio.
Suiza: En varios lugares pueden existir normas sobre el uso del bozal. Lo mejor es contactar con tu alojamiento de vacaciones o con el servicio veterinario para más información.
Croacia: Dobermann, Rottweiler, Mastín, Pastor Alemán, Pastor Belga, American Staffordshire Terrier, Bull Terrier, perros de pelea japoneses, Gran Spitz Japonés, Sarplaninac y sus cruces deben ir atados y con bozal en espacios públicos.
Hungría: Aquí debes llevar siempre correa y bozal contigo.
Dinamarca: Algunas razas no están permitidas, como American Bulldog, Boerboel, Pit bull Terrier, Tosa Inu, American Staffordshire Terrier, Kangal, Ovtcharka de Asia Central, Ovtcharka del Cáucaso, Sarplaninac, Tornjak, Fila Brasileiro y Dogo Argentino. Los perros adquiridos antes del 17 de marzo de 2010 pueden entrar en Dinamarca, pero deben ir atados y con un bozal cerrado. Se debe demostrar que fueron adquiridos antes de dicha fecha. Los perros que se parezcan a estas razas también deben demostrar que no pertenecen a ellas.

En muchos destinos de vacaciones existe obligación de bozal. Asegúrate siempre de llevar un bozal que se ajuste bien y de haber enseñado a tu perro a ponérselo y llevarlo antes del viaje.

Un resumen más amplio de los requisitos de entrada por país está disponible en la página web del LICG.